Cienfuegos: 200 años y más…

Aquel nombre originario se debe a Fernando VII, entonces monarca español que emitió la Real Cédula para la fundación de nuevas colonias en la isla; Jagua, porque así llamaban los aborígenes a la región y a un árbol.

La orden para fundar nuevas comunidades en la Isla de Cuba obedecía a una preocupación de la metrópoli por el incremento de población negra – entre esclavos y libertos -, lo que le hacía temer un levantamiento similar al que acaeció en Haití entre los años 1791 y 1804, que dio paso a la primera revolución independentista de nuestro hemisferio. Fue así que familias provenientes de Burdeos y de la Louisiana se convirtieron en los Padres Fundadores del nuevo asentamiento, aunque bajo bandera española.

Con ellos trajeron sus costumbres, su laboriosidad, y la estirpe que hasta los días de hoy prevalece entre muchos de sus descendientes, junto con una huella evidente en el trazado de sus calles y los balcones afrancesados del casco histórico. Diferente a los añejos años de la conquista, aquella gente vino a trabajar y pronto Fernandina de Jagua alcanzó una gran prosperidad.

Plantaciones, ingenios y un puerto de mar que propició su categorización de Villa de Cienfuegos aproximadamente una década después de la fundación. En la primera mitad del siglo XX la ciudad de Cienfuegos era ya una de las más prósperas de Cuba sin abandonar por ello la placidez de su paisaje y esa prestancia solariega que siempre la ha caracterizado. Cienfuegos alcanzó en el plano económico y cultural mucho y en poco tiempo.

Lo que nunca imaginaron sus fundadores es que aquella pequeña comarca de Jagua devenida en colonia por ellos; magnificada por su empeño laborioso y emprendedor, daría a Cuba y al mundo figuras relevantes para la cultura cubana y universal como Luisa Martínez Casado, Mateo Torriente, Arquímedes Pous, Benny Moré, Rafael Lay, Paulina Álvarez y Rafael Ortiz, junto a poetas y compositores como Antonio Hurtado del Valle, Mercedes Matamoros, Clotilde del Carmen Rodríguez y Eduardo Benet Castellón. Que por su teatro insignia Tomás Terry, pasaran figuras de la talla de Enrico Caruso y Jorge Negrete, sobre esas mismas tablas cuando en nuestros días se celebra el prestigioso y ya tradicional Festival Internacional del Monólogo.Ciudad cuna de intelectuales de la talla de Carlos Rafael Rodríguez y revolucionarios como Osvaldo Dorticós Torrado.

Es la Perla del Sur mambisa de los hermanos Fernández Cavada,José González Guerra “El Héroe de Manaquita” y muchos otros;  tierra también fertilizada con la sangre de Henry Reeve El Inglesito, que ofrendó su vida en los campos del cercano Yaguaramas durante la primera etapa de nuestra lucha independentista.

De hoy son artistas emblemáticos como la Orquesta Aragón, Lázaro García Gil, los hermanos Pedro y Roberto Novo, y el Conjunto de Sones Tradicionales Los Naranjos por mencionar unos pocos. Es una larga lista de nacidos aquí que han puesto en alto el nombre de esta ciudad, como Ana María Salas, la creadora de Toqui, el simpático personaje para niños, de alcance continental, así como otros que la abrazaron como madre adoptiva como el caso de la Tía Rosa, espirituana por nacimiento y cienfueguerísima por su infinito amor a este terruño. Es la tierra de cienfuegueros devenidos paradigmas como el Dr. Alfredo Espinosa Brito y el inolvidable Padre Panchito Ortiz, eterno enamorado de la canción Luna Cienfueguera.

Este Cienfuegos que celebra sus 200 años y sigue festejándolos por todo lo alto, es el mismo donde en 1957 sus marinos del Movimiento 26 de Julio se levantaron en armas el 5 de septiembre; el Cienfuegos donde lo mejor de su gente acudió al Parque Martí en busca de fusiles para junto a nuestros aguerridos sublevados pelear para derrocar a Batista y en apoyo a Fidel, alma de la Revolución en la Sierra Maestra.

Este también es el Cienfuegos que cuando Cuba fue agredida en 1961 sus milicianos, entre ellos los integrantes del Batallón 339 fueron de los primeros en enfrentarse a los agresores para derrotarlos junto a milicianos de otras partes de Cuba en menos de 72 horas.

Hoy celebra dos siglos de fundada la ciudad que Fidel escogió para visitar el 6 de enero de 1959 porque el líder máximo de la Revolución no quiso llegar a La Habana sin antes saludarla y honrar a sus héroes y mártires.

Al Cienfuegos laborioso, patriota y revolucionario; a quienes a lo largo de estos dos siglos dieron, cada uno a su modo lo mejor de sí, a sus benefactores conocidos y anónimos va dedicada esta festividad por su segundo centenario. Es la Perla del Sur, la que encanta y que cuando se viene a ver es imposible dejar de regresara ella, al extremo de que muchos deciden quedarse.

Aquí está la bahía orgullo nuestro, la de amaneceres plácidos y atardeceres románticos, esa cuyas aguas sirven de regazo a los destellos lunares. Nuestro mar, nuestra gente, nuestra historia que es patrimonio de la Patria; en conjunto estamos de fiesta por estos doscientos años, y más.

Autor