La ¨doble vacuna¨ contra la COVID-19

El virus se ha convertido algo así como el agua, un líquido que se expande entre los dedos de las manos, y cuando pensamos que lo hemos atrapado vuelve a escapar y se derrama en cascada por cada fisura posible. La diferencia está en que, en el caso de la trasmisión de cualquier variante del SARS-CoV-2, está demostrado que reducción de movibilidad, aislamiento social y distanciamiento físico, combinados con la acción de las vacunas, son como el antídoto perfecto.

El Doctor en Ciencias y Matemático de la Universidad de la Habana, Raúl Guinovart, lo definió en una sola frase cuando habló de ¨las dos vacunas¨. 

Y ahora que ya se sabe que estudios preliminares marcan y confirman que los candidatos vacunales cubanos Abdala y Soberana 02 producen anticuerpos neutralizantes a variantes del virus que circulan en el país como Alfa y Delta, las evidencias científicas provocan entonces que ese esfuerzo debía ser acompañado de una actitud más responsable en nuestro proceder cotidiano. Porque las vacunas no son mágicas, y el esfuerzo que les acompaña solo puede tener un mejor impacto cuando lo retribuimos de otro: el ser responsables.

Una sistematización de prácticas científicas habla de una vacunación rápida y masiva en el menor tiempo posible de toda la población, manteniendo coherencia en los períodos entre una dosis a la otra, y con también casi certeza de que la dosis de refuerzo como lo concebido para Abdala y Soberana 02, es lo más indicado.

Cuba marcha a la vanguardia en este sentido, y se aproxima al 30 por ciento del total de la población inmunizada, lo cual debe avanzar de manera sostenida hasta finales del presente año, abarcando incluso a la población pediátrica que ya forma parte de los ensayos clínicos.

De los 168 municipios que conforman el país, ya en 59 de ellos se inició la vacunación y 24 concluyeron su esquema completo de inmunización. La buena noticia es que, en las próximas horas, como se acaba de anunciar, casi un millón de personas residentes en otros 22 municipios, comenzarán a recibir su primera dosis lo cual quiere decir que nos aproximamos al cincuenta por ciento del total de estos territorios que ya estarán transitando o habrán culminado el programa de vacunación.

Y eso sin hablar de los llamados grupos de riesgo, entre los que se incluyen embarazadas, pacientes trasplantados, madres lactantes, trabajadores de la salud que también han formado parte de este esquema de vacunación.

Es un privilegio, en medio de un escenario complicado, porque disponemos de soberanía en este sentido que nos permite hacer nuestros propios diagramas de vacunación, segmentados, estratificados y en los tiempos que planificamos, sin distorsiones y respetando estrictamente los períodos de vacunación entre una y otra dosis.

Es un privilegio en Cuba, cuando para el resto del planeta no ha sido posible avanzar en la protección de la población, ni qué decir de las naciones del llamado Tercer Mundo con menos acceso aún a las vacunas.

En medio de la campaña de vacunación en el país, nuestros científicos no se han detenido. Buscan medir, en las condiciones de la aparición de nuevas cepas del virus, cómo logran impactar Abdala y Soberana 02. Otra alentadora noticia es que ambas vacunas crean anticuerpos neutralizantes para variantes como Alfa y Delta, esta última particularmente contagiosa y presente en territorio nacional, lo que evidencia que no se ha perdido tiempo y se avanza con paso firme desde nuestras investigaciones.

Ese acompañamiento permanente de los científicos y expertos cubanos no solo durante las diferentes fases de los ensayos clínicos de los candidatos vacunales, su impacto en la población y con la mirada puesta en nuevos proyectos y soluciones desde lo que va demostrando la propia ciencia, es lo que hace a nuestra nación más resiliente para buscar alternativas en aras de vencer cada nueva adversidad que aparece.

De ahí que acompañar este esfuerzo que se traduce en beneficio para todos, sin costo alguno para ningún cubano, es la mejor manera de reverenciar esos esfuerzos dotados de inteligencia y amor.

 

 

 

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