por En virtud de la colaboración establecida a partir de 2019 entre el Ministerio de Cultura y la Ybor Art Factory (YAF), esta última institución todos los jueves ofrece una programación destinada a promover los valores del arte cubano contemporáneo -literatura, danza, artes plásticas, artesanía, moda y música-, en un proyecto que a raíz de la pandemia de la COVID-19 se ha sostenido mediante la modalidad en línea.
De tal modo, coincidiendo con Cubadisco, los Van Van se enlazarán con el sitio web de la YAF y su página de Facebook en un concierto en vivo que repasará el medio siglo de trayectoria de la agrupación fundada por Juan Formell, y celebrará el merecimiento del Premio Extraordinario por el álbum Mi songo.
Este fonograma, perteneciente al catálogo de la Egrem, reunió nuevas versiones de 11 de los tantos temas icónicos de la orquesta y un popurrí de las piezas de los años 70 que posicionaron al colectivo en el gusto popular.
La YAF fue concebida como una ventana para que los estadounidenses, y de manera particular los de origen cubano, tuvieran la posibilidad de aproximarse a la realidad cultural del archipiélago y desterraran prejuicios y visiones estereotipadas y distorsionadas al uso en determinados círculos del sur de la Florida.
El promotor de la iniciativa, Vicente Amor, defiende la manera de presentar, de momento, los espectáculos en vivo por vía digital, hasta que la nueva normalidad permita encuentros cercanos. Señala que el público natural es el de Tampa, aunque dado el enlace virtual son muchos los que en otros lugares de Estados Unidos, y mucho más allá, siguen y disfrutan los eventos.
Ybor City fue asiento de emigrados cubanos en la segunda mitad del siglo XIX, luchadores por la independencia de Cuba y, ante los trabajadores de las manufacturas tabacaleras, José Martí pronunció emblemáticas piezas oratorias de inflamado contenido patriótico.
En recientes declaraciones al periódico Cubarte, Amor afirmó ser «de los que creen que hoy, lastimosamente, ya no podemos hablar solo del bloqueo como el mayor de los males; hay una agenda mucho más amplia que articula el bloqueo y la persecución financiera con una furiosa agenda de desestabilización desde las redes sociales. Es penoso y brutal y por supuesto, me opongo a eso».
«Nuestra meta –ha dicho Amor- es mostrar la riqueza que puede traer a nuestras vidas la cultura; la belleza, calidad y grandeza de la cultura cubana, la cual, por el clima político de Estados Unidos, no ha podido ser apreciada en su real dimensión».