por Así, un día cualquiera, de un año cualquiera, muy cercano en el tiempo, Dubler Rolando Vázquez Colomé egresó de la Universidad de Oriente y llegó a hacer su servicio social en la emisora provincial Radio Victoria, de Las Tunas, donde había varios periodistas y narradores comentaristas deportivos de reconocida calidad, entre los que se incluyó. Y ahí comenzó su brillante carrera.
Desde muy temprano el joven egresado comenzó a demostrar que no solo contaba con pasión, sino con conocimientos del mundo deportivo y una forma peculiar de proyectarse en el medio radial, que lo convertían en un gran comunicador, capaz de mover las opiniones de los aficionados hacia un lado o hacia otro, de despertar pasiones, de exacerbar ánimos con análisis profundos y casuísticos, y de provocar intensos y candentes debates ante una situación determinada de una disciplina equis, aunque el béisbol casi siempre se imponía por encima de todas las demás.
Así, otro día, cambió su rumbo y se fue hacia el seminario 26, para ocupar el puesto como periodista deportivo que dejaba Juan Emilio Batista al jubilarse, y la afición (oyentes y lectores) comenzaron a conocer otra faceta del joven profesional, y con sus análisis escritos en la página deportiva comenzó a enseñar los rasgos de su talento también como redactor, y al mismo tiempo, trazó pautas con sus análisis en la televisión local, como una máquina que procesaba diariamente datos, hechos, estadísticas, de cuanto evento deportivo aparecía en el escenario.
Si algo bueno tiene Dubler como narrador-comentarista deportivo o como reportero de los temas del deporte, es que no se deja cegar por la pasión, y por el contrario, sus análisis son imparciales en cumplimiento de su papel como mediador ante las audiencias, porque él sabe que la pasión es enemiga de un periodista, que siempre debe tener su mirada en la objetividad, aun cuando esta pase por la subjetividad, y por ello lo mismo exalta el papel del equipo de béisbol de Las Tunas que lo critica, o exalta una actuación de Industriales, o de Ciego de Ávila o de Santiago de Cuba, y la gente lo sigue y lo respeta, porque sabe que él parte al medio cuando hay que partir, como el verdadero profesional de un campo que arrastra pasiones.
Igual sucede con su blog personal Esquina caliente en Internet, espacio en el que le da tratamiento a los más diversos temas del deporte mundial, y son muchos los usuarios que lo siguen por sus informaciones y análisis, porque él sabe que al final, la vida de un periodista deportivo es algo más que una esquina caliente.