por Durante la celebración en la provincia de Sancti Spíritus del Día Mundial de la Alimentación y el Día Internacional de las Mujeres Rurales, Friedrich reconoció la necesidad de garantizar alimentos a toda la población, así como la importancia de adaptar la producción agrícola al cambio climático.
En el mundo casi 800 millones de personas siguen padeciendo de inseguridad alimentaria y, de ellos, alrededor de 160 millones de niños menores de cinco años sufren por esa causa, aseguró.
El alto representante también recalcó el papel de las mujeres rurales, quienes representan un cuarto de la población mundial, y señaló que con la participación de todas podría producirse hasta un 30 por ciento más de alimento, lo que equivale a 150 millones de personas menos con hambre.
La mayor de las Antillas sobresale a nivel continental en la atención a la población femenina rural, destacándose la implementación de una novedosa estrategia de género por parte del Ministerio de la Agricultura que resalta el papel de estas dentro del sector.
La FAO tiene la esperanza de erradicar el hambre para 2030, lo que requiere un cambio significativo en la forma de sembrar y producir la tierra y las mujeres agricultoras juegan un papel fundamental en ello, señaló el funcionario.
Desde 2007 la Asamblea General de la ONU estableció el 15 de octubre como Día Internacional de las Mujeres Rurales con el objetivo de garantizar el empoderamiento y el acceso de esta parte de la población a los recursos agrícolas.
Asimismo, la FAO proclamó el 16 de octubre como Día Mundial de la Alimentación con la finalidad de concientizar a los gobiernos del mundo y países desarrollados sobre el problema alimentario y fortalecer la solidaridad en la erradicación del hambre, la desnutrición y la pobreza.
Fuente: Prensa Latina.