por “Somos un gobierno del pueblo y para el pueblo. Esa es la esencia programática de la Revolución. Esta tarea requiere de un alto grado de sensibilidad y humanismo, para poder orientar y atender como se merece a nuestro pueblo”, aseveró.
El Jefe de Gobierno rechazó la actitud de “esos funcionarios que a veces atienden a la población y cuando empiezan a escuchar el planteamiento comienza a ripostar e intentan cortarlo, o quitarle la palabra a la persona”.
“Esos funcionarios están equivocados y no son merecedores de la responsabilidad que ocupan. Al ciudadano que se para frente a nosotros y nos plantea un problema, hay que escucharlo; y al final, con toda esa sensibilidad y humanismo, hay que explicarle las razones y los motivos, poniéndonos siempre en el lugar de la otra parte, como si ese problema que nos están planteando, lo tuviera uno mismo”.
En el encuentro realizado este viernes en el Palacio de la Revolución, donde participaron representantes de los Organismos de la Administración Central del Estado y de otras instituciones, así como todos los territorios del país a través de videoconferencia, con el fin de evaluar el comportamiento de la atención a la ciudadanía en las diferentes estructuras, el Primer Ministro Manuel Marrero Cruz consideró que, aunque este asunto a nivel nacional necesita un tratamiento diferenciado, tiene un fuerte basamento territorial.
“La población está en el barrio, en las comunidades, está en los municipios y en la provincia. Esas estructuras a nivel de territorios tienen que ser fuertes y profundizar en las causas que originan los distintos planteamientos y quejas de las personas”, subrayó Marrero Cruz. 
El Jefe de Gobierno insistió en la impostergable necesidad de perfeccionar a nivel de país, en el momento actual, la actividad de atención a las quejas, inquietudes y sugerencias de la población, a nivel gubernamental, de los organismos e instituciones.
En ese sentido, al reflexionar acerca de un asunto que requiere alta sensibilidad, Manuel Marrero Cruz evocó la labor sistemática y los esfuerzos del Comandante en Jefe Fidel Castro, y la pasión que entregó a la tarea, de manera particular, Celia Sánchez Manduley.
“Las nuevas y sucesivas generaciones que tenemos la responsabilidad de garantizar esa continuidad para que prevalezcan los principios de la Revolución, tenemos que defender que se mantenga esa confianza que el pueblo siempre ha depositado en nuestro proceso revolucionario. Pero, para lograr ello, tenemos que escuchar siempre al pueblo”, aseguró el Primer Ministro.
En el provechoso intercambio, María del Carmen Cedeño, Jefa de la Oficina de Atención a la Población del Palacio de la Revolución, resumió la labor realizada por este departamento durante el año 2020, periodo durante el cual se atendieron las quejas o solicitudes de más de 30 mil 700 personas.
Este asunto generó un amplio debate que subrayó la importancia de prestar cada vez más atención a las inquietudes del pueblo, que los problemas se atiendan más directamente en la base, en los órganos y organismos provinciales, que el perfeccionamiento de esta actividad se realice poniendo ciencia e innovación, y que los encargados de asumir esta tarea busquen respuestas y soluciones con prontitud, ética, respeto y confianza.