por En el contexto de su visita oficial de dos días a la Isla, con la cual busca fundamentalmente reforzar los vínculos económicos y comerciales bilaterales, el mandatario colombiano depositó una ofrenda floral ante el monumento que perpetúa la memoria del Apóstol de la independencia nacional.
Acompañado por el vicecanciller cubano Rogelio Sierra, el jefe de Estado suramericano recorrió el interior del Memorial, sitio que atesora valiosos materiales documentales sobre la vida y obra de Martí.
Posteriormente, Santos fue recibido en ceremonia oficial en la sede del Palacio de la Revolución y luego sostuvo conversaciones oficiales con el General de Ejército Raúl Castro Ruz, Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros.
En la mañana, el dignatario colombiano participó en un foro empresarial en el Hotel Nacional de Cuba, durante el cual ratificó que otro de los propósitos de su estancia en la Isla es agradecer el apoyo determinante de este pueblo al proceso de paz de su país.
La Habana acogió por casi cinco años las pláticas entre el gobierno de aquella nación y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia-Ejército del Pueblo (FARC-EP), para poner fin a un conflicto armado de más de medio siglo.
Santos arribó a Cuba la noche de este domingo, acompañado por una amplia delegación integrada por María Claudia Lacouture, ministra de Comercio, Industria y Turismo; Felipe Jaramillo, presidente de ProColombia, y representantes de cerca de 20 empresas de diversos sectores.
Desde que asumió la Presidencia de su país en 2010, Santos ha visitado la Isla en varias oportunidades; la primera en marzo de 2012, luego para participar en la II Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) -en enero de 2014-, y regresó en septiembre de 2015 para la rúbrica del acuerdo sobre Justicia Transicional en el proceso de paz para Colombia.
También viajó a La Habana en junio del pasado año, para asistir a la firma de los acuerdos sobre cese al fuego y de hostilidades bilateral y definitivo, dejación de las armas y garantías de seguridad entre su gobierno y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia- Ejército del Pueblo (FARC-EP).