La histeria de las bestias
Las bestias depredadoras, cuando no tienen hambre se comportan relativamente tranquilas, aunque expectantes para descubrir nuevas víctimas ante su insaciable estómago.
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Las bestias depredadoras, cuando no tienen hambre se comportan relativamente tranquilas, aunque expectantes para descubrir nuevas víctimas ante su insaciable estómago.
En diferentes fechas del siglo XIX tienen lugar en Cuba hitos históricos y demográficos vinculados con Francia. Así hacia finales de la centuria anterior, a la mayor de las Antillas arribaron numerosas familias de ese origen o descendientes procedentes del Santo Domingo francés, con motivo de la Revolución haitiana.
El quinteto de la muerte debía no solo dedicar sus neuronas a la destrucción, la guapería, el odio, a querer aplastar a gobiernos legítimos para imponer su despreciable sistema de vida. Trump, Pence, Pompeo, Abrhams y Marco, por el contrario podían ser, al menos, un poco más sensatos y preguntarse por qué, tras 60 años de la revolución, no han podido ni podrán jamás arrodillarnos.
Cienfuegos, la Perla del Sur, la Linda Ciudad del Mar acaba de celebrar con merecida alegría sus primeros doscientos años. Corría el 1819 cuando Don Luis D’Clouet, militar francés a las órdenes de la corona española presidió el acto fundacional de la que primero se llamó Colonia Fernandina de Jagua.
Las hienas son carroñosas, cuando matan emiten algo así como una risa histérica en señal de triunfo. Pero, salvando la distancia entre la bestia y el humano, siempre pienso que este último procede bien parecido a aquella.