por La reciente experiencia en Venezuela de un notable ciberactivismo internacional gestado en la Red de Redes a favor del presidente Chávez durante las elecciones presidenciales de 2012, demostró que las redes sociales constituyeron una herramienta efectiva en la gestión de comunicación política de su campaña, al lograr consolidar y unificar posiciones que favorecieron indiscutiblemente el apoyo a la misma, por parte de los venezolanos, tanto dentro y fuera del país, así como una impresionante solidaridad internacional.
En esos espacios comunicativos, la creciente popularidad del presidente Chávez, significó un indicador muy claro del éxito alcanzado en la gestión de su gobierno. En la actualidad Chávez es la figura política de más impacto en las Redes Sociales en Venezuela, y la segunda en el mundo. Tan solo a través de su cuenta @Chavezcandanga, en Twitter, supera ya los tres millones de seguidores y es seguido además por importantes personalidades, no solo del ámbito político.
Por otro lado, miles de venezolanos, incluyendo los que se encontraban en el exterior, se mantuvieron al tanto de lo acontecido en el país en tiempo real, gracias a la Red de Microblogging, y estuvieron en condiciones de coordinar acciones primarias y espontáneas de promoción a su campaña a nivel planetario, mediante el uso de Facebook y los Blogs personales.
#HoyGanaChávez, preludio de una victoria electoral en Venezuela
Un sencillo análisis a la evolución de la etiqueta en la Red Social Twitter y su relación con el proceso eleccionario en Venezuela, permitía, sin predecir el futuro ganador, establecer un nivel de aceptación relativo a los dos candidatos, incluso luego de las primeras horas de la contienda.
Mediante el uso de sencillas herramientas públicas de analítica social, fue posible medir la etiqueta #HoyGanaChávez en la red social Twitter y su hito favorable a la campaña. Esta etiqueta alcanzó menciones millonarias y en pocas horas se convirtió en Trending Topic (TT), una especie de agenda social distribuida a nivel planetario, que afecta no solo a las personas, sino incluso a los medios, y constituye una expresión o reflejo del también llamado periodismo ciudadano, al relacionar y promover no solo “conversaciones globales”, sino además cualquier tipo de contenido multimedial, independientemente de la plataforma de Internet donde se encuentre.
Era evidente que no solo los venezolanos apoyaban masivamente a Chávez, sino que también recibía el apoyo de millones de personas en el mundo, las cuales intercambiaron no solo mensajes, sino también miles de fotos, gráfica, videos y textos en apoyo al presidente, además de promover significativamente su Blog, sitios Web y perfiles sociales favorables a su gestión, tanto los oficiales como los alternativos.
La movilización en Twitter resultó abrumadora y se constituyó en fuente primaria de información para miles de personas como opción alternativa a los medios tradicionales y digitales, buena parte de los cuales estaban en manos de la derecha venezolana y distorsionaban constantemente el mensaje a favor de Capriles, así como promocionaban resultados preliminares de la contienda, incluso, aun sin confirmar de manera oficial por el CNE.
¿Ciberguerra contra Chávez?
Teniendo en cuenta lo anterior, puede afirmarse, sin lugar a dudas, que el presidente Chávez logró la victoria en el escenario 2.0 mucho antes de haberlo materializarlo en la realidad. Ante esa clara evidencia, antecedente de un posible triunfo en las urnas, la derecha venezolana no dudó un instante en comenzar a utilizar tácticas de Ciberguerra, en esta caso conocidas con el nombre de «hacktivismo».
De esta manera, varios medios venezolanos en Internet que brindaban cobertura a las elecciones, fueron víctimas de ataques informáticos a sus respectivos sitios Web, buscando minimizar un poco el efecto de un contundente mensaje político a favor del presidente, que luego era replicado por millones de sus seguidores en FaceBook, Twitter y otras redes, no solo en Venezuela, sino en todo el mundo.
A cada minuto transcurrido desde el inicio de la contienda, la imagen de un Chávez vencedor, ya desde la Red de Redes, quitaba el sueño de la oposición, a tal punto que, además de ataques informáticos, llegaron a adquirir un espacio en Internet para alojar un falso sitio del CNE (Consejo Nacional Electoral) con similar nombre de dominio (DNS) donde colocaron información manipulada sobre el proceso eleccionario. Semejante estrategia hicieron hace algunos años cuando Globovisión compró un dominio relacionado con el PSUV (www.psuv.org)
Acciones parecidas, poco éticas e incluso fraudulentas, solo pueden ser ejecutadas cuando existe un mecanismo consolidado para su coordinación, además del dinero y los recursos necesarios. No obstante, este comportamiento no resulta nada nuevo, pues esta misma oligarquía fue la que trató de “Silenciar” a los medios durante el fallido golpe de estado contra el presidente Chávez en el año 2002.
El común denominador de estas maniobras constituye una prueba evidente de la consolidación de la llamada “Guerra de cuarta generación”[1] en Venezuela, un proceso que comenzó prácticamente desde el momento en que Chávez asumió el poder y cambió para siempre el rumbo de la nación venezolana, incrementando significativamente su influencia y protagonismo político en el continente americano y en todo el planeta
[1] La Guerra de Cuarta Generación busca de manera desenfrenada a través de la Propaganda manejar la psiquis de cada uno de los ciudadanos a fin de que respondan a objetivos previamente establecidos. Ramón Lobo. La guerra mediática ¿un componente de la Guerra de Cuarta Generación? http://www.aporrea.org