por Y resaltó que «este trabajo llegó para quedarse, tenemos que integrarlo más, tenemos que perfeccionarlo más, tenemos que articularlo más, solamente hemos empezado a andar o a reanimar prácticas y experiencias que se tuvieron en otro momento».
Sin dudas, la unidad convoca participación y contribuye a la transformación de los barrios. Por eso las primeras experiencias del vínculo de los Organismos de la Administración Central del Estado, las organizaciones de masas, autoridades del Partido y de la UJC en 62 barrios de mayor complejidad en la capital del país, ratifica que entre todos podemos ponerle corazón a Cuba.
Socializar experiencias, desde el completamiento de las estructuras en la base y la participación de la comunidad para lograr sostenibilidad en los territorios, resultó uno de los propósitos de este intercambio en el Palacio de la Revolución, donde participaron los miembros del Buró Político Roberto Morales Ojeda y el Primer Ministro Manuel Marrero Cruz, viceprimeros ministros, ministros, las máximas autoridades del Partido y el Gobierno de La Habana, académicos, dirigentes de las organizaciones de masas, estudiantiles y representantes de los Consejos Populares en la capital del país.
«Se ha ido levantando el papel de las organizaciones, del delegado, el vínculo de los estudiantes universitarios, de las instituciones, algo extraordinario», aseguró el Primer Secretario del Comité Provincial del Partido en La Habana, Luis Antonio Torres Iribar. Y es que la fusión entre todos los factores de la comunidad en los municipios habaneros, el diagnóstico de los problemas del barrio desde las propias necesidades de los pobladores para impactar en la solución de las vulnerabilidades, ya deja enseñanzas que fueron expresadas por representantes de varios ministerios. 
La titular del Ministerio de Comunicaciones, Mayra Arevich, habló de la experiencia en el conocido barrio habanero del Fanguito en el municipio de Plaza de la Revolución con la rehabilitación del servicio del agua, que ya impacta en la comunidad, también sobre la legalización de varias viviendas.
En Arroyo Naranjo, con el apoyo del Ministerio de la Construcción, se han desplegado todas las potencialidades. La prioridad es buscar la solución dentro del propio barrio, afirmó René Mesa Villafaña, titular de este organismo.
Mientras, apuntaba la Ministra de Educación, Ena Elsa Velázquez Cobiella, en su vinculación con cinco barrios de la Lisa que, entre las primeras experiencias que va dejando el apoyo a los barrios de mayor complejidad en La Habana, están la necesidad de reactivar el trabajo social, el completamiento de las estructuras de las organizaciones de masas y la atención a las familias vulnerables. 
Para el Coordinador Nacional de los CDR, Gerardo Hernández Nordelo, esta experiencia de trabajo ha creado un ambiente muy favorable para avanzar sin soluciones mágicas e impulsar nuevos proyectos, un criterio que fue ratificado por Karla Santana Rodríguez, Presidenta de la FEU, cuando habló de la voluntad popular de participación y la gran disposición de los jóvenes durante este proceso.
El Presidente cubano puntualizó la necesidad de reactivar en medio de estas acciones,el papel de la Asamblea Municipal del Poder Popular y de la figura del Presidente del Poder Popular en cada territorio.
«Ratificar el concepto de que nosotros no vamos a intervenir los barrios, vamos a apoyar los barrios y tiene que salir el diagnóstico del barrio, las propuestas tienen que salir del barrio, las ideas tienen que salir del barrio y nosotros vamos a ayudar a canalizar todo eso y a trabajar con las personas, con los actores que están en el barrio, que eso sería lo que nos permitiría articular bien los conceptos de participación y de democracia en las tareas del barrio», acotaba.
El Primer Secretario del Partido consideró imprescindible trabajar en la definición de las facultades de los municipios, así como distinguir qué es lo mínimo que debe tener una comunidad.
Perfeccionar cómo se organiza la labor en la comunidad, y tener la capacidad de escuchar a la población, tener en cuenta sus sugerencias para buscar las mejores soluciones a los problemas, resultaron retos identificados por Miguel Díaz-Canel durante el intercambio con autoridades de los ministerios y de la capital del pais que apoyan y son protagonistas en las acciones que se desarrollan en 62 barrios de mayor complejidad en La Habana.
«Potenciar la capacidad de oír lo que nos plantea la población para atender y facilitar lo que nos están proponiendo como proyectos, como ideas, como sugerencias, y también como insatisfacciones», señalaba. Y consideró importante lograr diseñar los mapas de actores que pueden trabajar en cada comunidad, en lo que tenemos que ser lo más inclusivos posibles, para no repetirnos y que las cosas queden bien.
Ahora lo importante es extender la experiencia al resto del país, destacó, con las características de las provincias, de los territorios, sobre la base de que en las provincias no hay ministerios, pero hay entidades estatales que responden también a toda la estructuración institucional que tenemos en el país.
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