por A inicios del pasado siglo muchos de nuestros públicos receptores siguieron la Primera Guerra Mundial por la radio. Los atentados del 11 de septiembre y el derrumbe de los Torres Gemelas de Nueva York, fueron vistos cada segundo por las pantallas de los televisores, y muy pocos años después la muerte de Steve Jobs y el terremoto en Haití fueron seguidos – incluso por los medios -desde algún que otro canal de una red social (RS) en Internet.
Un ejemplo de la rapidez con la que se mueve la información y la propaganda hoy día en la gran telaraña mundial lo simboliza este hecho que a continuación referenciamos:
La muerte de Whitney Houston fue reportada por la red social Twitter media hora antes de que se diera el comunicado oficial y que las agencias de noticias crearan un boletín de prensa. Tal ejemplo presupone que, el mundo se mueve y en la era digital, las noticias no necesariamente nacen en las agencias de noticias, por lo tanto, con dichos cambios, las audiencias conocen los hechos y/o acontecimientos por otros canales comunicativos, y el acceso de los públicos hacia los medios y agencias sólo se realiza para profundizar y ampliar los conocimientos del hecho en cuestión.
Estamos, por lo tanto asistiendo a un nuevo sistema de circulación de noticias, que está causando preocupación en las salas de prensa. Por esto, la BBC de Londres anunció un nuevo manual para sus publicistas, periodistas, reporteros y propagandistas y productores, en el que se les exige enviar sus noticias antes que nada, al sistema de reporte interno para que salga por los canales oficiales, antes que en alguna de las redes sociales.
Chris Hamilton, editor de redes sociales de la BBC, reiteró el valor que la cadena brinda a Twitter y otras redes sociales, no sólo como plataformas para captar audiencias, sino también para compilar noticias. Pero aseguró que la información debe llegar a la sala de prensa antes que a otros sitios, para así poder comunicar los aconteceres con veracidad.
La recepción y distribución de información es hoy un fenómeno interesante en naciones desarrolladas al existir un número cada vez más creciente de usuarios de equipos con tecnología móvil. Con ellas cualquier tipo de noticias se propaga de manera viral muy fácilmente.
Cuando vimos en la TV cubana, en el documental Razones de Cuba, al agente Emilio, Carlos Serpa Maseira, tratando de enseñarnos como se fabrica una FALSA NOTICIA sobre un “supuesto ataque a las Damas de Blanco”, veíamos el uso de un móvil directamente conectado con la mal llamada Radio Martí, sin embargo, rápidamente se propaga la noticia realizada en la redacción de la emisora enemiga que fue replicada en blogs y redes sociales adjudicadas a su política editorial, que son miles de las que navegan por la red. Es a mí entender, como si se activara una especie de “telaraña desinformadora” que pulula por Internet.
A ese mundo nos estamos enfrentando con nuestra verdad, en medio de un proceso de readecuación de nuestro proyecto económico que tiene como principal detractora esa gran prensa manipuladora y hegemónica.
Al terminar el año 2011, la red social Facebook contaba con 800 millones de usuarios y Twitter – la que más se acerca a las técnicas de la radio, porque distribuye la información en sólo 140 caracteres- lograba 500 millones de usuarios. Son cifras para no desestimar en los tiempos de la rápida distribución de la información.
Hoy la radio no es quien tiene la inmediatez, sin embargo en días pasados leía una noticia alentadora para nuestro medio y es que un estudio de la Consultora Aegis Expert de España afirmaba que los españoles (una sociedad tecnológicamente avanzada) emplean una media de 98 minutos al día en escuchar la radio, y que las mujeres con un 51% del porcentaje frente a un 48% de hombres son las que más tiempo escuchan la radio, y que las emisoras de radio temáticas son las más favoritas de ese público.
Por lo tanto no estamos asistiendo a la muerte de una radio, estamos en este mundo nuestro de hoy asistiendo a la readecuación de una radio que se erige como medio fundamental de transmisión de valores a nuestras sociedades.
Hoy nuestras audiencias tienen el beneficio de recibir la información desde una variedad de fuentes, y existe con la presencia de internet la posibilidad de verificarla al instante, por lo que la radio puede convertirse en una fortaleza de nuestra comunicación y una fuente para aclarar rumores, y encauzar la información “de cuello y corbata”.
Los periodistas, comunicadores sociales, corresponsales, los editores de nuestras web, traductores, webmaster, editores de audio, estamos llamados a insertarnos en este mundo de nuevas técnicas de la comunicación con un discurso diferenciado, personalizado según las oportunidades que ofrezcan los contenidos, pero prestando atención a ese lenguaje universal que aporte una mayor comprensión de nuestras realidades.
Hoy cuando los medios de comunicación se replantean sus funciones, quienes trabajamos en los medios radiofónicos y dus sitios digitales, debemos establecer estrategias y nuevas formas de explotar al máximo los avances de la autopista de internet que incluyen el conocimiento de programas- software, desarrolladores SEO, los lenguajes multimediales, los centros de información digital, los buscadores en internet, las aplicaciones y herramientas y los canales en la web ) conocer y aprovechar estas autopistas de la información nos hará más fortalecidos en la labor de defender la imagen de Cuba.