por El resumen debe ser consecuente con sus peculiaridades, por lo que no incluirá aquellos materiales propios de emisiones informativas inmediatas posteriores que serán transmitidas por los medios al día siguiente. No obstante, puede contemplarse, por excepción, cualquier adelanto noticioso siempre que cuente con el máximo de interés. Es decir, constituye una recopilación de lo más significativo que se haya transmitido en el día a través de todos los espacios informativos y hasta el último precedente.
Es evidente que el género información constituye el más alto por ciento de los materiales por transmitir, e incluso puede llegar a ocupar el total del tiempo. No obstante, un resumen no excluye la posibilidad de transmitir algún trabajo de otro género que, por su alta significación, resulte aconsejable.
Este espacio, como otros informativos, requiere una gran atención en cuanto a la forma, precisamente por el hecho de que reitera lo que posiblemente ya haya sido escuchado por una parte de la audiencia. Esta circunstancia obliga a convertir al resumen en un producto atractivo, eliminando toda posibilidad de hacer de él un depósito de informaciones de otros programas que se repiten íntegra y mecánicamente. Es por ello que se hace imprescindible no sólo la síntesis, sino además la utilización de una redacción periodística consecuente con un resumen y con estilo particular. Es decir, no ser primicial no significa dejar de ser atractivo y poseer alto vuelo de realización.