por Debemos burocratizar lo menos posible la Revista Informativa, se debe proponer el desvío de esos temas hacia los boletines de noticias.
No pueden existir compromisos con la difusión de las numerosas actividades del sector improductivo presentes en el entorno de cada día. En no pocas Revistas Informativas encontramos que más del 30% de los contenidos radiados son reportes de este tipo que poco aportan al interés de los radioyentes. Considero que una Revista Informativa no debe exceder en una emisión el 15 por ciento.
Cuando sintonizamos un programa y escuchamos que se inicia con tres o cuatro temas de los mencionados estamos estimulando el cambio hacia otro informativo. Si los mismos son de gran importancia evitar por todos los medios los bloques tan rechazados por quienes nos escuchan. Dosificarlos por toda la emisión y tener en cuenta a los protagonistas principales.
El director de una Revista Informativa contará con los conocimientos necesarios para informar a los dirigentes de las áreas informativas cuando los contenidos de reporteros, corresponsales y la redacción no son capaces de responder a las necesidades informativas del programa. Señalará los ejemplos concretos, los errores que no aportan al éxito de la Revista.
Aún subsisten problemas con los contenidos de buena parte de las informaciones económicas presentes en la Revistas Informativas. Sumamente criticado por los radioyentes es el carácter triunfalista predominante en la difusión de la información económica. No es posible que nos entiendan cuando hablamos de la “exitosa producción” de determinada mercancía cuando su ausencia en las redes de distribución es evidente.
Una de las causas de este lamentable problema radica en la falta de contrastabilidad de las fuentes, una exigencia de los temas de carácter económico antes de su difusión. El director velará por la veracidad de la propuesta y eliminará aquellas de poca efectividad.
Otro problema es el mal uso o exceso de cifras (cifrismo), que entorpece la redacción y por consiguiente la mejor comprensión de los mensajes.
Algo fundamental para el éxito de la difusión de las informaciones económicas radica en que las mismas no pueden reflejar exclusivamente los aspectos cognoscitivos, esto es un grave error, es fundamental incorporarles valores emocionales capaces de acercar las mismas al oyente y una proximidad que garantice la aceptación popular.
En el libro “Informar por radio” expresamos
La información económica requiere
Que lo producido se hizo con determinados esfuerzos y limitaciones
Cómo se distribuirá la producción obtenida
Los esfuerzos de los colectivos laborales por mejorar y ampliar la producción
Los mejores resultados individuales con sus nombres. Reconocimientos
Cuando usted habla de éxitos en la producción, de incrementos y no le aclara a los oyentes cuáles serán los beneficios directos que recibirá pierde valor, es fría y por consiguiente no será bien recibida.
Si la información económica que llega a las manos del Director de la Revista Informativa no está dotada de emocionalidad, no alcanzará el corazón de quienes nos escuchan, no será recordada a diferencia de otros temas, movilizadores de la atención, como los de salud, deportes o cultura que poseen un valor emocional.
No sólo debemos aspirar en cada emisión a la objetividad, hay que considerar siempre la proximidad de lo seleccionado para ser radiado. El director es el máximo responsable de excluir lo que no le aporte mérito a su Revista Informativa.